El reto es no bajar la guardia y mantenernos en el “Top Of Mind”
Diego Moscoso, emprendedor entusiasta, nos da una perspectiva de su negocio, cómo era la situación previa a Covid-19 y como lo está afrontando.
Cuéntanos sobre tu actividad profesional.
La tendencia de los países del primer mundo incluye la construcción de vivienda con sistemas más eficientes que los tradicionales. Se busca utilizar sistemas revolucionarios donde se abaratan costos, se incorporan materiales ecológicos, renovables y reciclables y permiten realizar verdaderos proyectos a medida según las necesidades de cada cliente. El uso de la madera en una estructura reduce entre ocho y trece veces la energía necesaria en comparación con una equivalente de acero o de hormigón armado. Bajo este concepto innovador creamos hace 9 años Madebú, una industria que aplica la ingeniería de madera en la fabricación de elementos estructurales para la construcción, especialmente vigas de madera laminada encolada.
La madera laminada encolada tiene más de 100 años de evolución y perfeccionamiento, constituye un elemento fundamental en proyectos de vanguardia alrededor del mundo. Los datos de los países desarrollados son impresionantes, en Finlandia el 98% de las viviendas unifamiliares son de madera y en EE UU o Canadá, el 80%.
Iniciamos la industrialización de vigas procesando madera tropical, con procesos muy apegados a la normativa chilena de fabricación de madera laminada encolada. Si bien los resultados técnicos eran ideales, los costos eran muy altos. Necesitábamos una alternativa sostenible y económicamente viable; dimos un giro de timón para centrarnos en trabajar con la madera cultivada de pino. Una decisión que nos permitió manejar volúmenes importantes y alcanzar precios competitivos esto hace posible que nuestras vigas sean hoy parte de importantes proyectos de construcción. Las vigas que fabricamos de hasta 13m de largo, tienen innumerables ventajas, pero siempre se destacan la resistencia, la versatilidad y lo amigables con el ambiente.
¿Qué es la madera laminada?
Quizás la forma más sencilla de entender qué es la madera laminada, es describir el proceso de fabricación. En planta se recibe los tablones secados en cámara con una humedad del 12% y se los corta descartando todas aquellas secciones que no sean estables estructuralmente. A las piezas que quedan, se las ensambla longitudinalmente a través de uniones de “finger joint”. Estas piezas largas llamadas lamelas, son molduradas para que obtengan una sección perfectamente rectangular y puedan posteriormente ser ensambladas por sus caras en una prensa neumática. Así se obtienen vigas macizas de “Madera Laminada Encolada” (MLE) que pueden alcanzar grandes dimensiones y tienen ventajas estructurales superiores en algunos aspectos al hierro y al hormigón.
¿Cómo describirías la situación previa al Covid-19?
La tecnología MLE, también conocida como Glulam por su abreviatura en inglés, permite incursionar en proyectos con características estéticas y estructurales muy interesantes. Junto con colectivos de arquitectura hemos construido viviendas de hasta 3 pisos totalmente estructuradas en madera laminada con mucha eficiencia, precios competitivos y un resultado de belleza indiscutible. Sin embargo, conseguir que toda la gente involucrada con la construcción confíe en la madera laminada, no ha sido fácil. Ha sido un proceso de educación continua, de dar a conocer las bondades del producto a través de redes, visitas, conversaciones, eventos y sobre todo de promoción de los proyectos exitosos que se van ejecutando.
¿Cuéntanos que pasó con la llegada del Covid-19?
Llegó el Covid-19 y al igual que a muchas industrias nos planteó nuevos desafíos. Nos hemos fijado la meta de mantener las plazas de trabajo y estar al día con los pagos a nuestros proveedores. Tenemos 3 ejes establecidos:
Somos los fabricantes más grandes de Madera laminada del Ecuador
Y siendo este un sistema vanguardista, versátil, amigable con el ambiente y que además es tendencia en países desarrollados, nos obliga a hacer los esfuerzos necesarios para no desacelerar la introducción de las vigas Glulam en el mercado. Las herramientas tecnológicas de comunicación nos permitieron durante la cuarentena mantener reuniones con arquitectos, explicamos detalladamente los procesos de fabricación de las vigas y sobre todo sus ventajas; hemos despertado interés en nuevos clientes que tienen proyectos en ejecución. La madera laminada sigue siendo un material desconocido en el Ecuador y necesitamos difundir sus características y aplicaciones; encontramos en nuestras redes sociales una herramienta poderosa con la que llegamos a miles de potenciales clientes con información relevante sobre procesos de fabricación, historia, proyectos y especificaciones técnicas que explican por qué se debe considerar madera para construir.
El famoso término “reinventarse” significa para mí, usar nuestro mismo potencial, con el menor número de adaptaciones para entregar un producto diferente.
La post-cuarentena es una oportunidad para desarrollar y comercializar productos de menor valor agregado. No queremos desenfocarnos, lo nuestro es la madera y gracias a las buenas relaciones establecidas con nuestros proveedores, disponemos de madera en bruto seleccionada de primera calidad de diferentes especies, secada en cámara y a un precio muy competitivo. Estamos desarrollando un scope de piezas de madera dimensionada con las medidas más demandadas sumando la posibilidad de que se incluya servicios de moldurado o de finger joint.
A lo largo de nuestra trayectoria hemos tratado con innumerables profesionales de la construcción
Con algunos de ellos logramos establecer una relación comercial, pero muchos se quedaron en el camino. Hemos categorizado nuestra base de datos y estamos realizando acercamientos para entender mejor aquellas necesidades que en su momento no pudimos atender. Muchas relacionadas con precio, seguimiento, capacidad de producción especificaciones técnicas y otros aspectos que quizás ahora podemos satisfacer gracias a nuestro desarrollo y crecimiento. Estamos creando un método ordenado para ir reconectando a estos profesionales con la ingeniería de madera
¿Cuál es tu reto para seguir adelante?
El reto es no bajar la guardia y mantenernos en el “top of mind” de nuestro segmento en la cuarentena. La madera está considerada como el material para la construcción del Siglo XXI y estamos comprometidos para que el Ecuador no se quede rezagado en el desarrollo sostenible de la construcción.
Muy interesante entrevista